Israel es
sumamente interesante, aunque a veces nos puede parecer chocante. Tiene muchos
contrastes, incluida su arquitectura.
JERUSALÉN
Bazar de Jerusalén |
Iglesia del Santo Sepulcro |
Capilla del Santo Sepulcro dentro de la Iglesia |
Un momento de oración en la Iglesia del Santo Sepulcro |
Iglesia del Monte de los Olivos |
Monte de los Olivos |
Muro de los lamentos |
Muro de los lamentos y el domo de la roca |
Otra de las cosas que me encantaron de Jerusalén, es que hay gatines por todas partes y bueno, generalmente son fotogénicos 😍
Dónde hospedarse?
Yo me hospedé
en las afueras de la ciudad amurallada y creo que fue una buena decisión, pues
tener que trasladarse por esas callecillas llenas de comerciantes que no te
dejan en paz y llenas de gradas y desniveles, cargando maletas, no me parece lo más adecuado.
Me llevé
una impresión un poco desagradable cuando llegué a mi hotel, pues aquello era
como cualquier local cerca de un mercado. Una vez adentro, la cosa cambió. Eran
pequeños apartamentos muy bonitos y limpios con refrigerador y microondas. Todo
el proceso de registro es automático y solamente vi a la gente de limpieza una
vez porque llegaron a tocarme la puerta para darme unas toallas.
Por
supuesto, la cantidad de hoteles es impresionante y hay de todos los precios y
gustos. Yo siempre me inclino por lo funcional: que sea limpio y que me quede
cerca de todo. Ese me quedaba cerca del punto de encuentro para los tours que
tomé y a unos 300 metros de la ciudad amurallada.
Masada, oasis de Ei Gedi y el Mar Muerto
Aunque no soy fan de ellos, tomé dos tours de un día cada uno. El primero me hacía mucha ilusión, pues era para ver el amanecer desde Masada, algo que quería hacer desde hacía muchos años cuando leí Caballo de Troya (el tour sale a las 3 de la mañana), luego visitar el oasis de Ei Gedi y terminar en el mar muerto.
Amanecer en Masada
Amanecer desde Masada, con el mar muerto (Y Jordania) al fondo |
El camino hasta la cima es bastante largo y empinado |
Al llegar al pie de Masada, el guía nos dio prácticamente una hora para subir, ver el amanecer y bajar. Yo caminé 2.5 kms. cuesta arriba, con muchas gradas en la mayoría de los casos (algo que mis rodillas no agradecen) y logré llegar a la mitad. Tenía la opción de seguir subiendo, pero como el tiempo no era suficiente no quería llegar arriba para tener que devolverme inmediatamente. Me quedé a medio camino para poder disfrutar el amanecer y eso realmente valió la pena!
Oasis de Ei Gedi
Al llegar al oasis, de nuevo, el
guía nos dio poco tiempo para estar ahí. La primera parte del recorrido te
lleva a una pequeña cascada con un riachuelo y se pueden ver animales en el
trayecto. Luego de esa cascada, todo es cuesta arriba y de nuevo, había que subir
un montón de gradas en poco tiempo. Yo opté por quedarme disfrutando del agua y
no subir (eso de andar con el tiempo en contra no me hace gracia).
El Mar Muerto
Río Jordán, Jericó y Belén
Río Jordán
Seguimos nuestro camino hacia el río Jordán, que sirve de límite entre Israel y Jordania. Así que ves Jordania a unos 10 metros de donde estás. El río es un pequeño charco en realidad, porque han construido represas río arriba y no han respetado el porcentaje de agua que pueden retener. Hay una marca de a qué nivel estaba el río hace 10 años, y ahora está como 3 o 4 metros más abajo.
Uno de los varios templos dedicados a San Juan Bautista, este del lado jordano |
De acuerdo a la tradición Cristiana, en este lugar Juan bautizó a Jesús (Marcos 1:7-11) por lo que se ha convertido en un sitio de peregrinación al que llega mucha gente a bautizarse. Muchos llegan en grupos religiosos de varias partes del mundo y hacen sus ritos en el río.
Desgraciadamente, debido a lo conflictivo de la zona, no solamente se pueden ver manifestaciones cristianas, sino otras nada cristianas, que desgraciadamente siguen presentes.
Jericó
Del río Jordán salimos hacia Jericó, que es la ciudad más baja del mundo con relación al nivel del mar y también la ciudad más vieja del mundo. Ahí hicimos una parada a ver un árbol que algunos dicen que tiene como 2 000 años y nuestro guía nos dijo que en realidad tiene como 500 años y que podría ser hijo o nieto del árbol original. La historia de ese árbol es que se cree que ahí se subió Zaqueo (que era muy chiquitillo) para poder ver a Jesús cuando entró en Jericó. Jesús lo vio y le dijo que pasaría la noche en su casa (Juan 19:1-5).
Del árbol
de Zaqueo nos fuimos al pie del monte de las tentaciones, donde tomamos un
teleférico para subir el monte y visitar el Monasterio de las tentaciones. De
nuevo a subir gradas desde donde te deja el teleférico. Creo que son 154 (algo
así dijo el guía). Lo interesante de este monasterio donde vive un único monje,
es que se cree que durante sus 40 días de ayuno, Jesús fue tentado por el
demonio en ese lugar. Todo el monasterio lo construyeron para resguardar una piedra
donde se cree que Jesús estaba sentado mientras el diablo lo tentaba por
segunda vez.Monaterio del monte de las tentaciones
Se cree que en esta piedra estaba Jesús cuando fue tentado por segunda vez por el diablo
En casi toda parada turística, habían "tours" en camello |
De Jericó
salimos para Belén. Ambas ciudades están en Palestina y la diferencia entre
Israel y Palestina es notoria. En Palestina las ciudades son más sucias, especialmente
Belén.
Lo primero que visitamos fue una tienda de
artesanías, que fue el mismo lugar donde comimos, pues con anticipación el guía
había tomado las órdenes y al llegar nos tenían listos o un Sandwich de
shawarma de pollo, o una pita con falafel. Nos recibieron con una botella de
agua y los refrescos no los cobraron. Antes de irnos de la tienda, nos
regalaron algunos souvenirs sin importar si habíamos comprado algo o no.
Ya llenos,
nos fuimos al campo de los pastores, donde se cree que el Ángel se le apareció
a los pastores para anunciarles el nacimiento del niño Jesús. Ahí visitamos una
ermita muy bonita y un par de cuevas donde pasaban la noche los pastores.
Nuestro siguiente destino fue la iglesia del nacimiento de Jesús, o Basílica de la natividad, que fue construida en el sitio donde se encontraba el Portal de Belén. Dentro de la Basílica hay una capilla en el sitio exacto donde se cree que nació el niño Jesús. Yo decidí no bajar a la capilla porque había demasiada gente y me dio un poco de claustrofobia, pero fue interesante estar ahí.
Esta iglesia compartida por la Iglesia Ortodoxa, la Iglesia Apostólica Armenia y la Iglesia Católica, y parece que a menudo se arman pleitos entre ellos, porque todos quieren ser el único dueño. Por ese motivo, la puerta de entrada es bastante baja y estrecha, porque ha habido ocasiones en que han entrado a caballo para apoderarse de la Iglesia. Durante mi visita, estaba a cargo de los ortodoxos y bueno, el trato hacia la gente dejaba mucho que desear, pero todo sea en el nombre del Señor!
Lo último que visitamos en Belén fue la gruta de la leche, donde se cree
que Jesús, María y José se escondieron mientras los soldados de Herodes andaban
matando a los niños recién nacidos. María estaba amamantando a Jesús y una gota
de leche cayó en el suelo, lo que provocó que la roca se pusiera blanca. Se
cree que las mujeres que no pueden embarazarse visitan la gruta, compran un
poquito del polvo blanco de la roca, se hacen un tecito y unos meses después
quedan embarazadas!